Un poema para compartir, publicado en mi blog: http://simplespoesis.blogspot.com/
MADRE
Tu rostro arrugadito y el paso vacilante
delinean tu imagen del ocaso en tu vida,
es el otoño que dibuja tu semblante
y despoja las fuerzas de tu alma alicaída.
Divaga tu mirada por espacios lejanos
deambula tu mente por recuerdos borrosos,
muchos años de bríos que marchitan tus manos
gastadas de cuidar tus frutos prodigiosos.
Profusa descendencia, hijos, nietos, bisnietos,
tenemos el ejemplo de tu sabia nobleza
que nos inspira para superar nuestros retos
y guardarte cariño eterno a tu grandeza.
Madre, conmigo estás hasta en la lejanía,
pues amparas al niño de espíritu apacible
que, aún hombre curtido, guardo de noche y día,
el niño bueno a quien tu enseñaste sensible.
Alex Villanueva
No hay comentarios:
Publicar un comentario